Amenaza cumplida

La red de simulaciones en el municipio de Guadalajara está de lujo. En el caso de la villa panamericana, parece que nadie sabe nada dentro del "gobierno" de la ciudad. La regidora Celia Fausto Lizaola del PRD, se hace la sorprendida e ignora que hace ya más de un año se le envió a ella, como a todos los regidores del ayuntamiento de Guadalajara, una información que adelantaba lo que ahora ella está tomando como un fracaso de la administración docta de Petersen Farah, un personaje que resultó ser un auténtico pájaro de cuentas. La villa panamericana se enfrenta a un acontecimiento que no estaba considerado: la crisis económica y el temor al riesgo. En lo que se juntan más inconvenientes, Fausto apunta lo que ya se sabía desde hace mucho: no hay proyecto ejecutivo ni estudios de impacto ambiental y de pilón, siempre no será un proyecto de redensificación del centro... ¿qué fue entonces lo que proponían para ello, pregunto curioso? 

Una pregunta más de un curioso: ¿se licitará obra sin proyectos ejecutivos y sin estudios de impacto ambiental? Esto, señores, nada más pasa en México. ¡Viva el surrealismo!

Lo chistoso es que ahora, ese proyectazo que las ilustradas mentes del urbanismo moderno no más allá de las aulas y el wc (con kleenex en la mano), pregonaban como el arranque de la modernidad (¡por fin, diosito, por fin!) en Guanatos, tiene un tufo de cadáver y parece que no tiene salvación. Por mí, arránquensela.

Un grupo de arquitectos y gente preocupada por el medio urbano y la conservación del patrimonio, así como interesados en el futuro de nuestro centro histórico, hicimos un análisis de los riesgos que significaba hacer la villa panamericana en el centro y en el Parque Morelos concretamente. Alertábamos de los problemas que representaba; las inconveniencias topográficas históricas y de paisaje; el irresoluto problema de la movilidad estaba señalado entonces; se alertaba de los problemas sociales de la zona y de su compleja solución con un proyecto urbano solamente. En fin, no hubo sino promesas de que se nos buscaría para discutir los temas y... hasta hoy no hemos tenido respuesta luego de casi dos años. Felicidades.

Tal vez la regidora estaba muy metida en otros asuntos personales o sus intereses no eran ahora los mismos (no estaban en puerta las elecciones, claro, claro), el caso es que parece que ahora declara cosas de las que en su momento estuvo advertida, pero calló. Mejor sería... bueno, ahí la dejo.

En lo particular, da tristeza que la ciudad que pudiera ser considerada un atractivo turístico y con potencial para ello, que lo tuvo y aún puede tenerlo, se la estén acabando personajes con una "visión" torpe de la realidad y con criterios mercantiles como única perspectiva, si es que perspectiva se puede llamar esta miopía mental de Petersen y de su ujier urbano Palomar, un personaje caido en desgracia como bien se puede observar. Creo firmemente que es necesario que quienes decidan sobre la ciudad sean sometidos antes a una evaluación de sus capacidades. Sin ello, Guadalajara seguirá por la ruta de su desaparición para convertirse en la imagen de esos mismos personajes que hoy cuestiono y que, sin duda, son el alma de esta tierra... ¿lo serán?

Foto cortesía de Arturo Campos de La Jornada Jalisco, gracias.